EL ABUELO ESTÁ LOCO (1967)


EL ABUELO ESTÁ LOCO. Título original: The Gnome-Mobile. Año: 1967. País. Estados Unidos. Director. Robert Stevenson. Intérpretes: Walter Brennan, Matthew Garber, Karen Dotrice, Richard Deacon, Tom Lowell, Sean McClory, Ed Wynn, Jerome Cowan, Charles Lane, Norman Grabowski, Gil Lamb, Maudie Prickett, Cami Sebring. Guión: Ellis Kadison (Libro: Upton Sinclair). Música: Buddy Baker. Canciones: Richard y Robert Sherman. Fotografía: Edward Colman. Productora: Walt Disney Productions. Duración: 84 minutos. Género: Infantil. Musical. Fantástico | Cine familiar

El genial Walt Disney había fallecido en 1966, pero su productora seguía en marcha con otros productores que no tenían su talento, ni sus ánimos innovadores, ni su visionaria mirada del espectáculo. Por eso, una vez fallecido, su productora experimentó un profundo declive. Sus películas empezaron a verse anticuadas, la inventiva disneyana estaba ausente. No fue hasta la llegada de Ron Miller a la dirección de la empresa una década después que ésta no volvía a arrancar.
El abuelo está loco es en cierto modo una secuela de Mary Poppins. Utilizando los mismos niños pero en ambientes más modernos, este filme que nos ocupa fue un patinazo en taquilla que motivó que los dos infantes regresaran a sus casas para llevar una infancia normal.
Falla el acabado del guión, muy poco pulido, el empobrecimiento de la puesta escena y los efectos que ya empezaban a verse obsoletos. Disney innovaba en cada película y su ausencia se deja notar demasiado. Por eso, las películas de la productora tras su fallecimiento fueron de mal en peor. En la actualidad la Walt Disney ya no es una marca que asegure calidad. Se han rodado muchas películas ajenas a su espíritu, como la serie Piratas del Caribe, pero la calidad de sus series de televisión han caído en picado hasta extremos inaceptables.  
El abuelo está loco tiene en su haber una secuencia de gran calidad, en cierto modo nos recuerda Siete ocasiones de Buster Keaton, en que unas chicas gnomos persiguen al varón soltero para cazarlo y casarse con él. Un verdadero ejemplo de ritmo y narración cinematográfica. Pero el resto es pobre de imaginación y de puesta en escena. Técnicamente se ve atrasada, obsoleta y pasada de moda. Es, eso sí, un filme simpático pero nada más. Le falta feeling, ilusión y fuerza. Un filme menor que no obstante conserva algunos residuos de la antigua magia.

Salvador Sáinz