LA REBELDE (1965)


LA REBELDE. Título original: Inside Daisy Clover. Año: 1965 País: Estados Unidos. Director: Robert Mulligan. Reparto: Natalie Wood (Daisy Clover), Christopher Plummer (Raymond Swan), Robert Redford (Wade Lewis / Lewis Wade), Ruth Gordon (The Dealer - Mrs. Clover), Roddy McDowall (Walter Baines), Katharine Bard (Melora Swan), Peter Helm (Milton Hopwood), Betty Harford (Gloria Clover Goslett), John Hale (Harry Goslett), Harold Gould (Cop on Pier), Ottola Nesmith (Dolores), Edna Holland (Cynara). Guión: Gavin Lambert (Novela: Gavin Lambert). Música: André Previn. Fotografía: Charles Lang.Warner Bros. Pictures. Productores: Alan J. Pakula & Robert Mulligan. Duración: 128 minutos. Drama. Años 30. Cine dentro del cine

Robert Mulligan (Nueva York, 23 de agosto de 1925 - Lyme, Connecticut, 20 de diciembre de 2008) fue un director estadounidense de cine y televisión adscrito al movimiento del Nuevo cine estadounidense y más concretamente a la llamada “generación de la televisión”, junto con Stanley Kramer y Robert Altman, entre otros. Le debemos películas como El gran impostor (1961), Cuando llegue septiembre (1961), Matar a un ruiseñor (1962), Verano del 42 (1971), El otro (1972). De filmografía irregular pero interesante.

La rebelde cuenta la historia de una golfilla, Daisy Clover, una chica de la calle que peina como un chico y viste como un chico que graba un disco en una cabina, tal como existía en aquella época, los años treinta, aunque estas máquinas yo las vi y utilicé muchas veces en los años sesenta y setenta en la estación de RENFE de Bilbao-Abando y su calidad de reproducción era muy deficiente.
La película es muy poco realista, centra su discurso sobre lo que podríamos denominar capitalismo de terciopelo. Es una fábula sobre una adolescente que de vivir en la calle con su presunta madre, una mujer de avanzada edad que ha perdido sus facultades mentales, se convierte de la noche a la mañana en una estrella de Hollywood. Una actriz adolescente que no tiene derecho de decisión sobre su vida y que es mangoneada por todos quienes la rodean. Incluso encontrará un joven actor (Robert Redford) que se casa con ella y la abandona tras la noche de bodas.
La crítica al Star System es feroz. El mayor defecto de la película es que parece que ha sido producida para el lucimiento de la estrella, Natalie Wood, que está mucho mejor cuando se adapta a su personaje y no al revés. Con todo es lo mejor de la película. Los actores principales en realidad salvan la función con su profesionalidad y la labor de Mulligan es excelente.
Rodada a mediados de los sesenta, evoca tres décadas anteriores al mundo de Hollywood que se pretende depravado y mezquino. El guión es bastante superficial, no parece que pretenda contar una historia, un proceso de destrucción sino exhibir las cualidades de la actriz central.
El personaje del galán es bastante estúpido, un personaje que de haber existido no hubiera durado dos días en Hollywood con sus desplantes y falta de profesionalidad.
Hollywood es un lugar, y más en aquellos tiempos, en que puedes pasar de mendigo a millonario en un día y al revés. De ser una estrella puedes acabar siendo un don nadie, un fracasado en un chasquido de dedos. Enfrentarse a tan poderosa industria es un suicidio. Un film menor, apreciable pero no redondo.

Salvador Sáinz