El congreso se divierte, film musical que intentó competir con los primeros talkies de Hollywood, que en aquella época hacían verdadero furor. La temática es atractiva. Se ha acabado, o al menos eso se creía, con las guerras napoleónicas y en Viena tiene un lugar un congreso para decidir el futuro de Europa. Concretamente la acción está ubicada tras el confinamiento del ex emperador en la isla de Elba, de la que escapa para el famoso reinado de los cien días que puso final a su ciclo histórico.
La pandilla de diplomáticos y mandatarios aparecen en la película retratados como auténticos zoquetes. La secuencia del teatro en que la compañía de músicos y bailarines de Viena ejecuta las famosas Danzas polovtsianas del genial Aleksandr Porfírievich Borodín (San Petersburgo, Imperio Ruso, 12 de noviembre de 1833 – Ibídem, 27 de febrero de 1887) mientras los dignatarios se quedan dormidos es antológica. Esa clase social parasitaria, incompetente y absurda queda perfectamente retratada.

Erich Karl Löwenberg (1894-1974), más tarde conocido como Erik Charell, fue un actor y director alemán. Él era el más conocido como director de revistas musicales y operetas, especialmente en Großes Schauspielhauss de Berlín. Charrell rodó tres versiones de El congreso se divierte, la versión la alemana, la francesa y la inglesa, las tres con Lilian Harvey. La gran estrella del momento. Resulta curioso la ubicación de la época, entre dos mandatos de napoleón Bonaparte, ya que europa vivía entonces una etapa conocida como las entreguerras, es decir los años entre la primera guerra mundial y la segunda. Una época muy dura, la República de Weimar, con la Paz de Versalles en la que Europa humilló a la nación alemana que, resentida, empezó a fraguar la abominación hitleriana. El doctor Goebbels, años después, censuró y prohibió la película que nos ocupa por la visión ácida que se da de la nobleza y de los altos mandatarios europeos.
La acción se centra en una pequeña historia de amor, una modesta y humilde vendedora de guantes (Lilian Harvey) le lanza al zar de todas las Rusias un ramo de flores que se onfunde con una bomba. El zar invita a la bella joven a una taberna apra divertirse un rato y pasear bajo los acordes de la Marcha Militar Nº 1 de Franz Peter Schubert (Viena, 31 de enero de 1797 – ibídem, 19 de noviembre de 1828) portando farolitos de papel en una escena bellísima.
La UFA, la productora de mayor renombre en aquel tiempo, intentó hacer frente al imperio incipiente de Hollywood pero las circunstancias históricas la hundieron sin remedio. Primero la ascensión nazi que secuestró prácticamente la producción para convertirla en propaganda política, la derrota alemana de la Segunda Guerra Mundial supuso un duro revés para la industria cinematográfica alemana que fue totalmente desmantelada y reducida a la mínima expresión.
Las circunstancias históricas hundieron las carreras de muchos actores y técnicos que se vieron obligados a emigrar o exilarse. Entre ellos el propio Erik Charell de ascendencia judía y además gay. Su paso en Hollywood fue negativo, el cine americano no estaba preparado para directores de gusto tan exquisito.
En El congreso se divierte nos encontramos con bellísimos e innovadores para la época movimientos de cámara, aquel largo plano secuencia en quela vendedora de guantes (Lilian Harvey) se monta al coche que le llevará a la presencia del zar, canta una canción, y realiza el recorrido en un impresionante plano.
Excelente película a pesar de que la restauración deje mucho que desear. Impagable documento de una época y de un saber hacer que parece haber desaparecido de las carteleras actuales. Eran otros tiempos.

Salvador Sáinz

Como era costumbre en aquella época, de El congreso se divierte se rodaron dos versiones más en otros idiomas. Una en francés con el siguiente reparto: Lilian Harvey (Christine "Christel" Weizinger), Lil Dagover (La condesa), Henri Garat (Alexandre Ulralsky), Armand Bernard (Bibikoff), Pierre Magnier (Metternich), Odette Talazac (La princesa), Robert Arnoux (Pépi), Sinoël (Ministro de finanzas), Jean Dax (Talleyrand), Paul Ollivier (el alcalde de Viena), Tarquini d'Or (el cantante).
En la inglesa el reparto es como sigue: Lilian Harvey (Christel), Conrad Veidt (Principe Metternich), Henri Garat (Zar Alexander I / Uralsky), Lil Dagover (condesa), Gibb McLaughlin (Bibikoff), Reginald Purdell (Pepi), Philipp Manning (Rey de Sajonia), Humberston Wright (Duque of Wellington), Helen Haye (Princesa), Spencer Trevor (ministro de finanzas), Tarquini d'Or (cantante).

Ambas versiones tuvieron un importante éxito en su época peo en la actualidad son completamente invisibles porque no se editan, de momento, en formato doméstico.