EL INFIERNO VIRTUAL DEL DR. WONG (1999)


EL INFIERNO VIRTUAL DEL DR. WONG. Título original: Dr. Wong's Virtual Hell. Año: 1999.País: Estados Unidos. Director: Jesús Franco. Reparto:Jesús Franco (Dr. James Wong), Analía Ivars (Loba), Lina Romay (Nelly Smith / Tsai Ming), Pedro Temboury (Doc Petry), Rachel Sheppard (Rita), Robert King (Wilfred), Joaquin Phre (Doorman), Tommy Chase (Primer hombre en Bar), Sol Clink (Segundo hombre en Bar), Casey Yip (Bailarina), Howard Vernon (Cagliostro). Guión: Jesús Franco. Música: Jesús Franco. Fotografía: Raquel Cabra. One Shot Productions. Duración: 97 minutos. Comedia. Fantástico | Secuela. Erótico. Serie B

A pesar de haber aparecido varios títulos de Jesús Franco en este Diario de Cine he de confesar de que nunca fui fan suyo, mis gustos siempre han ido por otros derroteros. Pero es un cineasta que está ahí y se debe hablar de él. En realidad he visto algunas películas suyas porque en ellas aparecen actrices que son amigas muy queridas por mi y no diré quienes son para evitar chismorreos de revista de peluquería.
El infierno virtual del Dr. Wong bate records en rareza Jesús Franco siempre se ha distinguido por su desfachatez, dicho en sentido positivo de la palabra, porque ha sido un auténtico cineasta independiente que ha rodado lo que le ha dado la gana y nos da la impresión de que se divertía como un enano en los rodajes.
Es significativo su erotomanía, a veces con un gusto dudoso, porque en esta cinta que nos ocupa el argumento, un remedo y parodia de Fu Manchú, se lo pasa por el foro dejándolo en segundo lugar y se centra en una serie de secuencias de sexo que ni siquiera tienen justificación argumental. ¿Para qué? Jess hacía lo que le daba la real gana y pasaba de todo, de los críticos y del ministerio de cultura y sus ridículas subvenciones.
A mí, lo que más me gusta de esta película, si es que se le puede llamar así, es Analia Ivars. Sólo su presencia justifica su visión. Una actriz que hubiera merecido mejores papeles de los que ha tenido.
Lo demás es puro cachondeo, dicho sin ánimos de censurar. Porque el cine de Franco es así, un disparato intencionado. Un autor distinto, un francotirador que pasaba de todo y se reía hasta de la gramática de Griffith. Uno tiene la sensación de que le están tomando el pelo con esta cinta, probablemente sea así. Pero eso más que un defecto es una virtud.
Acostumbrados a un cine pretencioso pagado con el dinero de todos, el cine de Franco es incluso un bálsamo. Un oasis de libertad en un país de catetos descerebrados. Un cine que no se toma en serio a sí mismo y que te hace gracia si tienes un mínimo de sentido del humor. No es ningún Kurosawa ni lo pretende. Jess sabía siempre lo que hacía sin avergonzarse por ello. De ahí que le considere pese a todo un cineasta simpático más que un creador sólido. Su cine es una juerga, puro cachondeo, y como tal debemos verlo.

Salvador Sáinz