UNA HORA MÁS EN CANARIAS (2009)


UNA HORA MÁS EN CANARIAS. Año: 2009. Países: España y Colombia. Dirección: David Serrano. Reparto: Angie Cepeda (Claudia), Juana Acosta (Mónica), Quim Gutiérrez (Pablo), Miren Ibarguren (Elena), Eduardo Blanco (Eduardo), Kiti Manver (Daniela), Isabel Ordaz (Noelia), Diego Martín (Germán). Guión: David Serrano y Olga Iglesias. Producción: Tomás Cimadevilla. Música: Alejandro Serrano, Ernesto Millán y José Ángel Sagi. Fotografía: Carlos Ferro. Montaje: Nacho Ruiz Capillas. Dirección artística: Paco Delgado. Vestuario: Paco Delgado. Coproducción España-Colombia; Telespan 2000 / Lazonafilms / Dynamo. Distribuidora: Vértice Cine. Estreno en España: 16 Julio 2010. Duración: 100 minutos. Género: Comedia romántica, musical.

El éxito de El otro lado de la cama (2002) y de su secuela Los dos lados de la cama (2005) han parecido que el cine musical español iba a renacer cual Ave Fénix de sus cenizas. Una hora más en Canarias (2010) sin ser un gran éxito es en cambio un filme agradable, simpático y nada desdeñable.
El filme cuenta con algunos elementos un tanto sorprendentes, esas dos hermanas colombianas, rivales en amoríos, que se tratan de usted y ese maduro cantante callejero, argentino, que intenta hacerse pasar por español peninsular sin gran éxito.
Los números musicales están bien conseguidos, aunque son pocos. Son momentos de alegría que desbordan la película.
Generalmente los musicales españoles son lo que antes denominábamos “películas con cantantes”. ¿En que se diferencia unas cintas con las presentes? Pues tanto en Una hora más en Canarias como en el díptico mencionado más arriba, los números musicales están integrados en el argumento de la cinta, en cambio, en las llamadas películas con cantantes las canciones son punto aparte y no se integran en el argumento. La acción se estanca en cada número y no avanza.
Esta nueva forma de musical, que no es tan nueva, pero sí lo es en nuestra industria, es una puesta al día de las antiguas zarzuelas y los espectáculos de Broadway que entronca con el gran cine musical americano.
Los actores se esfuerzan en cantar, pero no es lo suyo. Eso sí, salen airosos del trance. La película de David Serrano es graciosa y los actores están francamente divertidos.
De haberse producido en una cinematografía más grata con sus cineastas la obra hubiera obtenido un mayor éxito en taquilla, pero las Españas son siempre demasiado acomplejadas para aceptar los productos de su tierra. El autoracismo es muy poderoso.
Un espectáculo agradable, simpático y divertido es cómo podríamos definir a Una hora más en Canarias.  

Salvador Sáinz