LA VERBENA DE LA PALOMA (1963)

Esta zarzuela está inspirada en las fiestas madrileñas del 15 de agosto, fecha en que se celebra la procesión de la Virgen de la Paloma. Su estreno teatral fue el 17 de febrero de 1894 en el Teatro Apolo de Madrid, con el subtítulo de El boticario y las chulapas y celos mal reprimidos.


La verbena de la Paloma. Año: 1963. Duración: 98 min. Pais: España. Director: José Luis Sáenz de Heredia. Guión: José Luis Sáenz de Heredia (basada en la zarzuela de Ricardo de la Vega). Música: Tomás Bretón, Gregorio García Segura. Fotografía: Alejandro Ulloa. Reparto: Concha Velasco, Vicente Parra, Miguel Ligero, Ángel Garasa, Mercedes Vecino, Milagros Leal, Irán Eory, Félix Fernández, Silvia Solar, Alfredo Landa, Mary Begoña, José María Tasso, Antonio Ferrandiz, Antonio Moreno, Xan Das Bolas, Productora: Producciones Benito Perojo / Suevia Films / Cesáreo González Producciones Cinematográficas / Excisa S.A. (Spain)
Género: Zarzuela, Comedia Musical.

Comparar la versión de Benito Perojo con la de 1963 de José Luis Sáenz de Heredia es algo gratuito. Son dos épocas muy distintas en que la industria se encontraba en diferentes avances técnicos. La de Perojo al principio del sonoro y la segunda en la época del scope y el color.
La versión de 1963 tiene algunos aspectos superiores a su predecesora y otros inferiores.  La escena del Café de Melilla, las buhardillas repletas de gente de la primera eran unas secuencias impagables sustituidas por un vulgar patio de vecinos. Las secuencias “modernas” irritan y no sé bien a qué vienen. Paradójicamente son las secuencias más anticuadas de esta versión.
Pero en la parte positiva tenemos un reparto de campanillas. Miguel Ligero se supera a sí mismo, es un don Hilarión mucho más creíble, un hombre ya demasiado mayor emperrado en vivir aventuras galantes como si fuera un muchacho joven. Actualmente no se consideraría demasiado políticamente correcta esta zarzuela porque se considera que en la tercera edad también se tiene derecho al amor pero lo que se presenta aquí nada tiene que ver con eso.
Concha Velasco, Ian Eory y Vicente Parra están en el cenit de su carrera. Recuperamos a Ángel Garasa, un actor republicano que tuvo que huir a México dirigido precisamente por un director llamado “del régimen”.
Y están además José María Tasso, Agustín González, Modesto Blanch, Xan Das Bolas, Antonio Moreno, Félix Fernández y Alfredo Landa, rostros muy queridos por el público español de la época.
Si la versión anterior estaba rodada casi todo en estudio, en este caso predominan los decorados naturales, el scope y el realismo. Una visión distinta de la popular zarzuela que se merece una restauración en DVD de mejor calidad que sus pases televisivos con una calidad de imagen inferior.
En España podríamos haber tenido un musical excelente de no ser por nuestros complejos patrios. Primero la censura y después el amiguismo han sido un lastre demasiado duro de llevar.
Tenemos la presencia de este entrañable Don Hilarión, presentado como un viejo verde y no como una persona solitaria en busca de amor. Ese galán chuleta y celoso, esas dos muchachas en busca de mejorar su condición social. Toda una galería de personajes queridos cuyas réplicas son muy celebradas y que es lástima que nuestro patrimonio musical y cinematográfico se deje perder de forma tan vil.
Versión entrañable y afortunada.

Salvador Sáinz


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