QVO VADIS? (1925)

Nerón


Quo Vadis? Nacionalidad: Italia. Año: 1925. Dirigida por Gabriellino D'Annunzio y Georg Jacoby. Reparto: Emil Jannings (Neron), Elena Sangro (Popea), Rina De Liguoro (Eunica), Lillian Hall-Davis (Licia), Andrea Habay (Petronius), Raimondo Van Riel (Tigellinus), Gildo Bocci (Vittelius), Gino Viotti (Chilone Chilonides), Alphons Fryland (Vinicius), Bruto Castellani (Ursus), Elga Brink (Domittila), Arnold Kent (guardia romano), Marcella Sabbatini (chica), Lucia Zanussi), Guión: Gabriellino D'Annunzio y Georg Jacoby, basado en la novela de Henryk Sienkiewicz. Productor: Arturo Ambrosio. Partitura original: Cecil Copping. Fotografía: Curt Courant, Alfredo Donelli, Giovanni Vitrotti. Decorados: R. Ferro y G. Spellani. Vestuario: Armando Brasini.Productora: Unione Cinematografica Italiana. Duración: 90 minutos. Género: peplum.

En copia mal conservada Qvo Vadis? En su segunda versión muda presenta muchos puntos de interés y también otros discordantes. Es sabido que el incendio de Roma fue un accidente, no creado por un emperador loco que en realidad no era más que un ser simple al que se encumbró ilegalmente por ambiciones personales.
La película muda de Gabriellino D'Annunzio y Georg Jacoby muestra algunas facetas de Nerón que otras versiones han ignorado. Por ejemplo la pérdida de un hijo (por cierto otro error histórico, Nerón y Popea tuvieron sólo una hija llamada Claudia que murió a corta edad) que le trastorna y en cierto modo le humaniza. Popea no era tan ligera de cascos como aparece en el cine, su esposo Nerón cuando estaba borracho le propinó una patada en el estómago cuando estaba embarazada provocando un aborto y su muerte.
Durante las persecuciones su “esposa” era un muchacho llamado Esporo que se parecía mucho a Popea, a quien castró y le obligó a vestirse con las ropas de la difunta emperatriz.
De hecho la novela de Henryk Sienkiewicz en la que se basó la película es en realidad una metáfora del pueblo polaco, un pueblo que ha sufrido históricamente por estar situado entre dos grandes imperios como el ruso y el astrohúngaro que les han estado pisoteando durante siglos. Escritor de profundas creencias católicas se siente identificado con los primeros cristianos, que fueron perseguidos hasta la extenuación por parte de los paganos emperadores romanos o algunos de ellos para ser más exactos. Otros fueron tolerantes y no se preocuparon de las creencias religiosas de sus súbditos mientras no les molestaran.
Así Qvo Vadis reincide en los tópicos de un Nerón psicótico y extravagante. Un pueblo romano frikkie que va al coliseo (por cierto, entonces no se había construido) para ver espectáculos terribles con fieras  devorando humanos, gente crucificada o quemada viva y demás barbaridades. Tópicos que historiadores modernos ponen en cuarentena porque las fuentes son poco fiables.
Emil Jannings es Nerón, generalmente este papel recae en grandes histriones como Charles Laughton y Peter Ustinov, y el actor suizo nacionalizado alemán no desmerece de sus colegas porque era en aquel tiempo uno de los más importantes del cine mundial. Al llegar el sonoro su carrera se hundió porque no sabía hablar inglés que le cerró las puertas de Hollywood permaneciendo en Alemania. Su mayor error fue afiliarse al partido nazi para continuar trabajando y no ser represaliado, al perder Alemania la guerra las nuevas autoridades le condenaron al silencio y al ostracismo.
Su Nerón tiene calidad. Nos es presentado como un hombre  supersticioso que cree en las predicciones de una maga. Un artista mediocre, carente de talento, que se cree un genio de la lírica. Es malvado pero no grotesco.
El resto del reparto, del que sobresale Elena Sangro como Popea y Rina De Liguoro como la esclava Eunica, enamorada de su amo, tal vez el mejor personaje de la novela original que aporta sensualidad al áspero texto de Sienkiewicz.

Salvador Sáinz


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