J. EDGAR (2011)


J. Edgar. AKA: Hoover. Dirección: Clint Eastwood. País: USA. Año: 2011. Duración: 137 min. Género: Biopic, drama. Interpretación: Leonardo DiCaprio (J. Edgar Hoover), Naomi Watts (Helen Gandy), Armie Hammer (Clyde Tolson), Josh Lucas (Charles Lindbergh), Ed Westwick (agente Smith), Judi Dench (Annie Hoover), Damon Herriman (Bruno), Jeffrey Donovan (Robert Kennedy), Dermot Mulroney (coronel Schwarzkopf), Denis O’Hare (Albert Osborne), Lea Thompson. Guion: Dustin Lance Black. Producción: Clint Eastwood, Brian Grazer y Robert Lorenz. Música: Clint Eastwood. Fotografía: Tom Stern. Montaje: Joel Cox y Gary Roach. Diseño de producción: James J. Murakami. Vestuario: Deborah Hopper. Distribuidora: Warner Bros. Pictures International España. Estreno en USA: 9 Noviembre 2011. Estreno en España: 27 Enero 2012.

John Edgar Hoover KBE (1 de enero de 1895 – 2 de mayo de 1972) fue el primer director de la Oficina Federal de Investigación (FBI) en su presente forma. Director desde su creación, el 10 de mayo de 1924, hasta su muerte en 1972. Hoover sobrevivió a la gestión de siete Presidentes, que no pudieron destituirle por el coste político que les implicaba.
Se trata de un personaje muy controvertido en los Estados Unidos de América cuya personalidad es difícil de condensar en un solo largometraje en donde se omiten episodios muy desdichados como, por ejemplo, el Caso Rosenberg, un matrimonio que fue ejecutado en la silla eléctrica por espionaje, acusados de entregar la fórmula de la bomba atómica a la Unión Soviética. Una vez ejecutados se descubrió que eran inocentes.
Clint Eastwood nos habla abiertamente de su presunta homosexualidad aunque en realidad no hay pruebas concluyentes de que Hoover fuera gay y sólo rumores de dudosa credibilidad. Hoover fue un represor de las libertades de su país, se dedicó a espiar a políticos, presidentes incluso, con escuchas ilegales para controlarles y descubrir sus intimidades como los amoríos de John F. Kennedy. Muchos actores hollywoodenses tuvieron expedientes como Groucho Marx, Charlie Chaplin, a quien expulsaron de los Estados Unidos por Actividades Antiamericanas, y fue el ejecutor de la famosa Caza de Brujas.
En cierto modo Eastwood le justifica, el alto nivel de delincuencia de este país, la mafia, los gánsteres, los terroristas. La investigación policial estaba muy atrasada y tenía pocos medios para combatirlos. Fue muy difícil deshacerse de al Capone y John Gillinger. Pero para perseguir a esos criminales se convirtió en un inquisidor paranoico que utilizó sus energías y el presupuesto del Estado, dinero público, en la represión de izquierdistas, intelectuales y artistas de ideologías molestas para su estrecha forma de pensar.
Habría mucho que decir de Hoover y de su leyenda negra, incluso se le acusa –no en la película de Eastwood- de acciones criminales pero como no se pueden demostrar no se le puede imputar.
Le vemos aquí de forma suavizada, Hoover fue egocéntrico, mesiánico, paranoico, enfermizo. Un personaje que siempre ha sido mostrado como un ser repelente y antipático. Eastwood trata de mostrarnos su lado oculto, su lado humano. Repleto de contradicciones, homosexual reprimido que inicia cruzadas por la moralidad (¿) americana y en su afán de conseguir que su país fuera seguro lo convierte en una cacería de fantasmas.

Salvador Sáinz