ROBIN HOOD (2010)


ROBIN HOOD. Título original: Robin Hood. Año: 2010. Países: Reino Unido y USA. Dirección: Ridley Scott. Interpretación: Russell Crowe (Robin Longstride), Cate Blanchett (lady Marion Loxley), William Hurt (William Marshal), Mark Strong (Sir Godfrey), Oscar Isaac (príncipe Juan), Danny Huston (Ricardo I), Eileen Atkins (Leonor de Aquitania), Max Von Sydow (sir Walter Loxley), Kevin Durand (Little John), Matthew Macfadyen (sheriff de Nottingham). Guión: Brian Helgeland; basado en un argumento de Brian Helgeland, Ethan Reiff y Cyrus Voris. Producción: Brian Grazer, Ridley Scott y Russell Crowe. Música: Marc Streitenfeld. Fotografía: John Mathieson. Montaje: Pietro Scalia. Diseño de producción: Arthur Max. Vestuario: Janty Yates. Distribuidora: Universal Pictures International Spain. Duración: 141 min. Género: Acción, aventuras, drama, romance. Estreno en Reino Unido y USA: 14 Mayo 2010. Estreno en España: 13 Mayo 2010.

No muy bien tratada por la crítica, algo que ya no nos extraña, la visión de Ridley Scott de la leyenda de Robín de los Bosques presenta numerosos puntos de interés. Es ya bien sabido que cierta clase de películas son recibidas de forma sistemática con uñas y dientes, pero al cabo de un tiempo es mitificado con la misma celeridad que en la actualidad es denigrado.
Esta vez la crítica comenta que la invasión francesa de las costas inglesas recuerda el Desembarco de Normandía, como si eso fuera extraño. La historia suele repetirse desde el inicio de la humanidad no de una forma exacta pero sí aproximada.
Aunque inspirada en la Edad Media, el argumento es muy actual. Una fuerza opresora, un rey déspota y cruel que asfixia de impuestos a sus súbditos. Pero las diferencias se abandonan por una invasión extranjera, propiciada por el traidor de turno, esa especie que ha perdurado a lo largo de los tiempos en todos los países del mundo.
La historia pasa en Inglaterra, pero también podría transcurrir en España, en el Reino de Castilla y en el Aragón o Navarra porque esta historia de opresores y oprimidos es eterna. Mucho tiene que cambiar la humanidad para poner fin. Los intentos revolucionarios de Francia en el siglo XVIII y de Rusia en el XX se saldaron con grandes fiascos. Pero habrá que insistir hasta encontrar la fórmula exitosa de crear una sociedad nueva.
Mientras tanto tenemos los justicieros individuales como ese Robin Hood creado por Russell Crowe y esa Lady Marion a la que da vida Cate Blanchett. Los tiempos han cambiado desde los años treinta cuando triunfaron Errol Flynn y Olivia De Havilland. La mujer moderna del siglo XXI coge la espada para enfrentarse al enemigo, aunque como es una peli americana sin cuestionar el liderazgo del marido. De la bella y grácil damisela de los treinta hemos pasado a la esforzada amazona del presente pero trasportada a otra época. Una época cinematográfica en que las gentes no se comportan como si estuvieran en la Edad media, sino que parecen una recreación de los tiempos actuales.
Varias figuras del cine de siempre se asoman para animar la función: Max Von Sydow y William Hurt. El primero parece haberse escapado de una película de Ingmar Bergman. Un actor que da sólido prestigio a todo lo que toca.
Algunas desmitificaciones de guión, el rey Ricardo Corazón de León no es ser noble que todos pregonan sino un salvaje que se dedica a asaltar castillos para saquearlos arrasando todo a su paso. Si como gobernante tenía fama de “justo”, es un decir ya que era un gran saqueador y un ser violento, siempre se ignora en las versiones cinematográficas la verdadera causa por la que el trono pasó a manos de su hermano Juan Sin Tierra, considerado uno de los más desdichados del planeta.
Ricardo Corazón de León era homosexual, algo que en la actualidad no tiene ninguna importancia, o no la debería tener cuando su condición sexual es sistemáticamente omitida para no levantar escándalos innecesarios, pero provocó que no tuviera descendencia. Esa faceta al parecer da miedo abordarla porque molestaría, en cambio no molesta que saquee castillos y asesine a sus gentes con total impunidad. Sobre ese particular ver El león en invierno (1968) de Anthony Harvey.
Los actores están bien, sobretodo la pareja protagonista Russell Crowe y Cate Blanchett, una mujer interesante por su calidad profesional.

Salvador Sáinz