SPARTACUS: DIOSES DE LA ARENA (2010)

SPARTACUS: DIOSES DE LA ARENA. Título original: Spartacus: Gods of the Arena. Año: 2010. País: Estados Unidos. Dirección: Michael Hurst, Rick Jacobson, Jesse Warn. Actores: John Hannah (Quintus Lentulus Batiatus), Lucy Lawless (Lucretia, esposa de Quintus Lentulus Batiatus), Dustin Clare (Gannicus, gladiador campeón de la casa de Batiatus), Peter Mensah (Oenomaus, gladiador que se convierte en Doctore), Jaime Murray (Gaia, amiga influyente de Lucretia), Marisa Ramírez (Melitta, esclava personal de Lucretia y esposa de Oenomaus), Jeffrey Thomas (Titus Lentulus Batiatus, padre de Quintus), Stephen Lovatt (Tullius, Rival de Quintus para tener el mejor ludus), Manu Bennett (Crixus, gladiador galo), Nick Tarabay (Ashur, gladiador Sirio), Craig Walsh Wrightson (Marcus Decius Solonius, amigo de Quintus), Antonio Te Maioha (Barca, gladiador homosexsual), Gareth Williams (Vettius, Tullius' joven lanista), Lesley-Ann Brandt (Naevia, mujer esclava). Guiones: Aaron Helbing, Todd Helbing, Miranda Kwok, Steven S. DeKnight, Brent Fletcher, Tracy Bellomo, Andrew Chambliss, Daniel Knauf.Creador de la serie: Steven S. DeKnight. Producción: Chloe Smith, Charles Knight, Aaron Lam. Producción ejecutiva: Steven S. DeKnight, Robert Tapert, Sam Raimi, Joshua Donen. Cadena original: Starz (EE.UU.). Duración: 55 minutos, seis capítulos. Género: Drama, histórico. Época de ambientación: Siglo I a. C. Rodada en Nueva Zelanda.

Capítulos: Pasadas transgresiones / Missio / Paterfamilias / Bajo la máscara / Ajuste de cuentas / El amargo final

Spartacus: Dioses de la Arena es una precuela de seis episodios de Spartacus: Sangre y Arena. Cuando Starz iba a iniciar la grabación de la segunda temporada, titulada Spartacus: Venganza, Andy Whitfield su protagonista cayó enfermo, falleciendo poco después. Para hacer tiempo, en espera de la improbable recuperación del actor, que no se produjo, la productora se sacó de la manga la mencionada precuela que huele evidentemente a improvisación.  Al conocerse el desenlace, se grabó la segunda temporada real, Venganza con Liam McIntyre en el papel de Spartacus, protagonista también de la tercera y última, Spartacus: War of the Damned.
Es importante en todas las temporadas la aparición de Lucy Lawless, la Xena de años pasados, como Lucrecia, la dueña del ludus donde se entrenan los gladiadores. A pesar de, o tal vez gracias a su madurez continúa siendo una mujer hermosa y atractiva que enciende los ánimos de millones de espectadores con la generosa exhibición de sus encantos naturales.
Al ser una miniserie forzada por las circunstancias, esos Dioses de la Arena carece de una base argumental sólida. Más bien parece un relleno porque nada añade a la anterior entrega. Sin embargo aún contiene ese encanto especial pero también ciertos abusos, un lenguaje grosero y escenas gore que no vienen a cuento.
Lo mejor es la descripción de esa roma, en realidad la ciudad de Capua, donde se ofrecen espectáculos salvajes en la arena con unos gladiadores que se destrozan entre sí mostrando una violencia inusual que parecen haber sido creados por un programa informático doméstico llamado After Effects con el cual cualquier usuario puede creerse que es todo un Spielberg.
Así nos encontramos con unos combates bestias mientras en las gradas los espectadores fornican como condenados.
Las secuencias eróticas se suceden mostrando bellos cuerpos tanto masculinos como femeninos en su totalidad. No enseñando pudorosamente sus partes nobles, como suele ocurrir en las pantallas internacionales, sino al natural sin dejar nada a la imaginación.
Secuencias eróticas tanto de tipo gay, lésbico, bisexual y naturalmente heterosexual se alternan sin ningún complejo con una estética de comic agresivo y violento.
Los personajes están bien trazados, tienen su punto de humanidad y ternura. Teniendo en cuenta su evidente precipitación la serie no es anda desdeñable y resulta al menos divertida, agradable de ver en espera de poder visionar las otras dos temporadas que prometen ser mucho más interesantes.

Salvador Sáinz