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Nos encontramos ante un Bergman temprano, en la época que realizaba sus primeras obras maestras. El séptimo sello, rodada un año después, le consagró universalemnte. Pero en Sueños encontramos lo mejor de sí mismo.
Sueños (1955). Título original: Kvinnodröm. Género: Drama. País: Suecia. Duración: 81 minutos. Dirección: Ingmar Bergman. Interpretación: Eva Dahlbeck, Harriet Andersson, Gunnar Björnstrand, Ulf Palme, Inga Landgré, Benkt-Åke Benktsson, Sven Lindberg, Kerstin Hedeby, Siv Ericks, Gösta Prüzelius, Sigvard Törnqvis,
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El maestro Bergman estaba ya despuntando con sus primeras obras maestras, Sueños no es una de sus películas más conocida, pero ya sabe mostrar el lado más profundo en el alma humana de dos mujeres. Una modelo muy joven, algo atolondrada, y su jefa ya más madura pero que trata de aferrarse a una juventud que se le escapa. Para realizar un trabajo ambas deben viajar a otra ciudad, vivirá cada una su aventura personal hacia la nada. Dos aventuras extrañas y absurdas, sobretodo el de la chica joven.
Vivimos el sueño de un señor ya mayor que pretende recordar a su esposa encerrada en plena juentud en el sanatorio mental, la modela se le parece como dos gotas de agua y pretende vivir una impostura, una mentira que acaba de forma grotesca y sordida.
Bergman sabe captar los más mínimos detalles, cada mirada, cada gesto tienen su significado. Su estilo jamás cae en el melodrama hollywoodense, es austero y distante. Pero sabe mostrar con maestría las interioridades que esconde cada ser hiumano.
Salvador Sáinz
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