LA MELODIA DE BROADWAY (1929)


LA MELODIA DE BROADWAY. Título original: The Broadway Melody. Año: 1929. País: Estados Unidos. Director: Harry Beaumont. Reparto: Charles King (Eddie Kearns), Anita Page (Queenie Mahoney), Bessie Love (Hank Mahoney), The Angeles Twins (Chorus Girls), J. Emmett Beck (Babe Hatrick), Nacio Herb Brown (Pianist), James Burrows (Singer), Eddie Bush (Guitarist and Singer), Ray Cooke (Bellhop), Drew Demorest (Turpe - Costumer), Edward Dillon (Stage Manager), Mary Doran (Flo), Arthur Freed (Bystander in Rehearsal Room), Paul Gibbons (Guitarist and Singer), James Gleason (Music Publisher), Eddie Kane (Francis Zanfield), Ches Kirkpatrick (Guitarist and Singer), Carla Laemmle (Oyster Shell). Guión: Norman Houston, James Gleason (Argumento: Edmund Goulding). Música: Nacio Herb Brown. Fotografía: John Arnold (B&W). Metro-Goldwyn-Mayer (MGM). Duración: 110 minutos. Musical

La Melodía de Broadway (The Broadway Melody) es el primer "gran musical": la primera película íntegramente hablada con canciones y bailes, auspiciada por una gran productora y elaborada sobre un argumento melodramático. La Academia lo recompensó con el Oscar a la mejor película en 1929 (el primero ganado para el cine sonoro). Su director fue Harry Beaumont (10 de febrero de 1888 – 22 de diciembre de 1966) actor y guionista cinematográfico de nacionalidad estadounidense, que a lo largo de su carrera trabajó con diversos estudios, entre ellos Essanay Studios, 20th Century Fox, Goldwyn Pictures Corporation, Metro Pictures Corporation, Warner Brothers y MGM.
Tras su éxito, otras tres películas fueron producidas por la MGM: La melodía de Broadway de 1936, La melodía de Broadway de 1938 y La nueva melodía de Broadway , las tres protagonizadas por Eleanor Powell. En la tercera de las tres, su compañero de reparto fue el legandario Fred Astaire, rodándose uno de los mejores duos de toda su carrera. En 1942 se quiso rodar un nuevo episodio con Gene Kelly y Eleanor Powell, pero se canceló en el último minuto.
La película original tuvo un remake en 1940, recibiendo el título de Two Girls on Broadway. que no obtuvo ningún éxito. Broadway Rhythm, musical de la MGM de 1944 en Technicolor, iba a llamarse originalmente La melodía de Broadway de 1944.pero se cambió el título por el de otra canción que suele interpretarse en estas cintas.

La primera Melodía de Broadway fue todo un hito en la historia del cine. El canto de Jazz, que pasa por ser el primer talkie, es en realidad una película muda en todo su desarrollo a la que se añadieron escenas cantadas por Al Jonson.
En cambio La Melodia de Broadway es cantada de arriba abajo, pero también hablada. Presenta las novedades y las torpezas propias de películas primerizas. Los números musicales son muy estáticos, mucho plano fijo en que se desenvuelven los actores, pero aún así conserva en la actualidad su encanto. Recuerda a películas tipo Los cuatro cocos con los Hermanos Marx o Free and Easy con Buster Keaton que presentan un cierto lastre teatral en el primero y el segundo caso con escenas poco afortunadas.  
Canciones con música de Nacio Herb Brown y letra de Arthur Freed, éste futuro productor de la Metro, alcanzaron gran popularidad e influenciaron al género que acababa de nacer. Obviamente el musical no podía desarrollarse en el cine mudo, y fue precisamente la aparición del sonido el pistoletazo de salida.
Todos los tópicos del género se dan aquí cita, tópicos que en este caso era novedosos pero que se fueron repitiendo durante décadas de forma mecánica.
A musical siempre se le ha reprochado su poco calado dramático o cómico. De hecho las zarzuelas españolas presentan el mismo defecto, como obras de teatro suelen ser mediocres pero la parte musical es excelente.
Son como si pasaran dos películas en una. Una es insignificante y la otra genial, y en el montaje las fueran alternando las dos.
Aquí nos encontramos con la historia de dos hermanas que quieren triunfar en Broadway, una lo consigue y la otra fracasa.
El argumento habla de abnegación y sacrificio,  los actores empero son muy justitos y la coreografía es penosa. Tienen una cierta gracia, pero no son brillantes sino torponas.
You Were Meant for Me es una melodía muy bella. Wedding of the Painted Doll es en cambio un número muy curioso pero no se integra para nada en la película. Es como si fuese un punto aparte. Nos llama la atención la caricatura de los personajes, la actriz que desea triunfar y el amante rico que desea acostase con ella, algo que en aquel tiempo no se podía siquiera insinuar por ser contrario a la censura estadounidense. El punto de vista moralizante de la película es muy evidente. Las secuelas son mucho mejores como película, pero el musical no arrancó como género hasta la llegada de Arthur Freed a la producción diez años después. Pero eso es ya otra historia.  

Salvador Sáinz