MESALINA (1951)

MESALINA. Título original: Messalina. Año: 1951. País: Italia. Director: Carmine Gallone. Reparto: María Félix (Mesalina), Georges Marchal (Cayo Silvio), Memo Benassi (Claudio), Delia Scala (Cinzia), Erno Crisa (Timo), Carlo Ninchi (Tauro), Camillo Pilotto (Octavio), Jean Tissier (Mnester), Jean Chevrier (Valerio), Germaine Kerjean (Ismene), Ave Ninchi (Locusta), Michel Vitold (Narciso), Giuseppe Varni (Pallante), Luigi Almirante (El joyero), Lamberto Picasso (El astrologo), Gino Saltamerenda (El proxeneta), Cesare Barbetti (Lucio), Achille Majeroni (Apolonio), Giovanna Galletti (La cristiana). Guión: Vittorio Nino Novarese, Albert Valentin, Pierre Laroche, Cesare Ludivici (Argumento: Carmine Gallone). Música: Renzo Rossellini. Fotografía: Anchise Brizzi (B&W). Coproducción Italia-Francia-España; Produzione Gallone / Filmsonor / Sueva Films-Cesáreo González. Duración: 95 minutos. Antigua Roma, vida disoluta, drama.

La emperatriz Valeria Mesalina (en latín: Valeria Messalina) (25 d. C. – 48 d. C.) fue hija del cónsul Marco Valerio Mesala Barbado Mesalino y de Domicia Lépida Menor. Tuvo un hermano llamado Marco Valerio Mesala Corvino, que fue cónsul, y un medio hermano menor llamado Fausto Cornelio Sila Félix.
Mesalina llegó a ser la tercera esposa del emperador Claudio, a quien dio un hijo y una hija: Británico y Claudia Octavia.
Nos encontramos con uno de los personajes más celebrados del peplum por su vida, llamésmole licenciosa, pero ya se sabe que las censuras habidas y por haber no gustan de devaneos de ninguna especie. Por eso sus aventuras suelen ser siempre suavizadas hasta extremos infantiles como es en esta versión que nos ocupa. Se iba a rodar en España pero la censura franquista lo prohibió por lo que se tuvieron que utilizar los decorados de Cinecitta.
Para encarnar a la ninfómana imperial (pero menos) se llamó a la gran diva mexicana, la gran María Felix. María de los Ángeles Félix Güereña (Álamos, Sonora; 8 de abril de 1914—Ciudad de México, 8 de abril de 2002), más conocida como María Félix, fue una actriz y cantante mexicana. Es considerada una de las figuras femeninas más importantes de la llamada Época de Oro del Cine Mexicano. También fue considerada una de las mujeres más bellas del cine de su tiempo, y uno de los máximos mitos eróticos del cine de habla hispana.


La versión que nos ocupa, perteneciente a la postguerra italiana, época en que floreció el neorrealismo como reacción a un cine más académico, se ve lastrada por su época. Los guionistas no podían ir lejos por lo que la imagen de la caliente emperatriz se ve empañada por la intervención de la censura.
A pesar de que la Italia de entonces ya era una república continuaba siendo un país católico con gran influencia de la iglesia romana que imponía su moral sin ninguna clase de miramientos. Curiosamente se hace alusión al cristianismo en este film cuando en realidad era prácticamente desconocido en aquel tiempo. El emperador Claudio sintió curiosidad por el nuevo fenómeno pero no pasó de ahí. El cristianismo era considerado una secta más a la que no se prestaba ninguna atención.

Por eso esta versión en la actualidad se ve algo obsoleta pero no por ello nula. La presencia de María Félix pesa mucho y se nota, llena la pantalla y destila sensualidad en todos sus poros. Una actriz de fuerte carácter, toda una diva, y una de las mejores actrices mundiales de habla hispana.
Al conjunto le falta fuerza pero en ningún modo resulta agradable. La moda del peplum estaba por llegar en scope y blanco y negro con realizadores más ligeros como Vittorio Cottafavi (que pinchó nueve años después con el personaje) y Pietro Francisci.
A esta versión le falta erotismo, aunque tenemos un par de ballets sensuales enmedio de la trama y poco integrados en la misma. Aparte de la Félix lo mejor de la película. En cuanto al emperador Claudio desmerece mucho de otras interpretaciones, la de Derek Jacobi estaba por llegar y la de Charles Laughton se malogró por culpa de diversos incidentes.

Salvador Sáinz