LESLIE NIELSEN Y EL TRÍO ZAZ

Leslie Nielsen  (Regina, Canadá, 11 de febrero de 1926 - Fort Lauderdale, Estados Unidos, 28 de noviembre de 2010) debutó en las pantallas en "The Vagabond King" (1956) de Michael Curtiz, un remake de un film de 1930, pero alcanzó su celebridad con el impagable "Planeta prohibido" (Forbidden Planet, 1956) de Fred McLeod Wolcox, deliciosa película de ciencia ficción ambientada en un ignoto planeta donde Leslie se encontró a la bella rubia Anne Francis vestida con una seductora minifalda y al inefable Robby, el robot.
Tras rodar numerosos telefilmes y películas siempre en papeles "serios", "Aterriza como puedas" del grupo ZAZ le reconvirtió inesperadamente en un cómico obteniendo desde entonces una segunda vida como actor, y una popularidad que hasta entonces el cine le había negado. En esta línea de humor desmadrado, Nielsen protagonizó "Reposeída" (Repossesed, 1990) de Bob Logan, con Linda Blair parodiando su célebre papel de "El exorcista" (The Exorcist, 1973) de William Friedkin. Leslie encarnaba con gran hilaridad al padre Jedidiah Mayil, especialista en exorcismos. Linda Blair es Nancy Aglet, un ama de casa poseída por Satanás, quien harta de gastarse el dinero en detergentes por tanto vómito acabará llamando al exorcista de turno. En "Familia de alquiler" (1995) de Fred Gerber, con Christopher Lloyd, Nielsen es el propietario de un servicio de alquiler de familias, aunque esta vez se recurre a un humor amable lejos del habitual.
En "Drácula, un muerto muy contento y feliz" (Dracula: Dead and Loving it, 1995) de Mel Brooks, Nielsen encarna con propiedad al conde Drácula imitando a la perfección el acento húngaro de Bela Lugosi. Fue una pequeña revancha de Brooks por el triunfo de las películas del trío ZAZ, arrebatándole a su actor fetiche. La misma idea la tuvo el italiano Carlo Vanzine en "Golfos de Broma" (1996), parodia enloquecida de la Roma de los Césares mostrada como un hervidero de corrupción. Christian de Sica y Massimo Boldi completan el reparto. Un juez está empeñado en combatir al senador Atticus, principal implicado en una trama negra. El humor está basado en los paralelismos de la época clásica con la actual. Antes de fallecer Nielsen se vino a España para rodar un cameo en Spanish Movie (2009) de Javier Ruiz Caldera, un esforzado intento de rodar una ZAZ movie en donde lo mejor no es la película sino una corta promoción en la que el bueno de Leslie forma pareja con Chiquito de la Calzada.
"Espía como puedas" (Spy Hard, 1996) de Rick Friedberg, contaba ya con la aportación de Nielsen como productor ejecutivo, señal diáfana de que por fin ha conquistado su situación de estrella de la pantalla. En esta ocasión nos encontramos con la parodia de los thrillers modernos, "La jungla de cristal" sobretodo, o "Pulp Fiction" de Quentin Tarantino. Leslie Nielsen es aquí el agente secreto Steele, ya retirado del servicio, pero que se ve obligado a regresar para combatir los crímenes del General Rancor. Los gags siempre están servidos, como ese autobús conducido por el invidente Ray Charles, y en papeles de composición reencontramos al siempre excelente Charles Durning, así como Barry Bostwick, Andy Griffith, Marcia Gay Harden y Nicolette Sheridan ejerciendo de guapa de turno. Todos los clichés de los films de agentes secretos son puestos en solfa sin piedad ninguna. Espectáculo alocado y, sobretodo, tan divertido como una serie de excéntricas comedias que en los ochenta han intentado renovar el alicaído género dándole nueva vida, con gran éxito de taquilla, pero sobretodo con un nuevo concepto de la comicidad. Me refiero al llamado Equipo ZAZ.

"Aterriza como puedas" (Airplane, 1980) fue otro ejemplo de película sorpresa, un título de quien nadie esperaba nada, pero que sorprendió a propios y extraños por su innovador sentido del humor, herederos de los hermanos Marx y la Monty Python, con quienes tienen algunos puntos de referencia. Sus directores de origen judío (¡faltaría más!), hasta entonces desconocidos, Jerry Zucker, David Zucker y Jim Abrahams, habían nacido respectivamente en 1950, 1957 y 1944. Un trío que pasó a llamarse a partir de entonces el equipo ZAZ porque las tareas de producción, guión y realización eran compartidas al alimón por tan peculiar terceto. En "Aterriza como puedas" se dieron cita todos los tópicos de las películas de catástrofes, entonces en boga, poniéndolas literalmente en la picota.
Se trataba de una sucesión desenfrenada de gags absurdos en una línea marxiana, pero es necesario precisar una importante diferencia entre los Marx y los ZAZ. Las películas de Groucho, Harpo y Chico estaban basados en el enfrentamiento de unos individuos alocados contra una sociedad seria o "normal" (entre comillas). Es decir, una comicidad basada en el contraste de unos personajes cómicos con otros que no lo son. En cambio, en las películas del trío ZAZ, el esquema es distinto. Todos los personajes son excéntricos sin escepción, la normalidad es precisamente la anormalidad y los gags no están monopolizados por los protagonistas, sino que son ejecutados por todos los actores del reparto.
En "Aterriza como puedas" el argumento gira sobre una epidemia causada en un vuelo por un alimento en mal estado, lo que podría dar pie a un argumento dramático, pero en manos de los ZAZ es desmontado para demostrar lo absurdo de las situaciones que hemos visto repetidas en epopeyas anteriores (la serie de los Aeropuertos, por ejemplo).
Este inesperado éxito de taquilla lanzó al equipo ZAZ, a sus tres directores, a la fama. Jerry Zucker se había educado en Shorewood, Wisconsin, y junto a su hermano David se iniciaron en el cine en súper 8. Tras su graduación crearon, junto a Jim Abrahams, el Kentucky Fried Theater y más tarde pasaron a la pantalla grande como productores, guionistas y realizadores de "Aterriza como puedas", una película en la que aparece un mundo completamente grotesco, donde lo imposible es posible. Un universo repleto de ingeniosos gags visuales donde, siguiendo la máxima de Buster Keaton, nadie hace el idiota sino que se sorprende al espectador con las situaciones más insólitas. Eso es lo que consigue el trío ZAZ en su original filmografía.
El éxito de su primera película motivó una secuela, "Aeroplano 2, la secuela" (Flying High. The Sequel, 1982) de Ken Finkleman, donde el trío no intervino aunque estuviera realizada con el mismo estilo. Esta vez se trata del primer viaje a la Luna de una nave de pasajeros lo que justificará la parodia de algunas películas de ciencia ficción, como la serie "Star Trek" con la aparición de William Shatner en un papel episódico.
En ambas cintas vemos actores, tradicionalmente serios en papeles grotescos, tarea a la que éstos se entregan con verdadero entusiasmo hartos ya de su encasillamiento. Así Chad Everett, Peter Graves, Lloyd Bridges, Leslie Nielsen y Raymond Burr, entre otros, se autoparodian con verdadero esmero poniendo en solfa sus anteriores comparecencias cinematográficas.
El equipo ZAZ también escribió un guión de una película ajena, "Made in USA" (Kentucky Fried Movie, 1978) dirigida por John Landis, basada en los shows teatrales del trío antes de su entrada en el mundo del cine.
Más adelante llegó otro título del alocado terceto, "Top Secret" (Top Secret, 1984), una solemne broma a costa del mundo del espionaje. Nick Rivers (Val Kilmer), gran estrella del rock, llega a Berlín Este para participar en un "Festival Internacional de la Cultura", pero todo forma parte de un maquiavélico plan del general Streck (Jeremy Kemp) para invadir la Alemania Federal. Aparición grotesca de Omar Shariff en el papel de un agente secreto, quien apresado en el interior de un automóvil triturado en un desguace, saldrá convertido en una especie de chatarra andante. Peter Cushing, célebre astro de la Hammer, también tiene una impagable aparición como un despistado librero sueco.
"Desde hace tiempo -declararon los ZAZ- nosotros teníamos una vaga idea: hablar de la Segunda Guerra Mundial de una parte, y presentar un poco de rock'n'roll de otra. Finalmente decidimos contar una historia de nuestros días. La selección de un Estado totalitario debía permitirnos repasar el pasado a nuestro modo: burlarnos de las convenciones y los clichés de muchas películas tratando el tema de la Segunda Guerra Mundial, distribuyendo guiños sobre otros géneros cinematográficos".
"Por favor, maten a mi mujer" (Ruthless People, 1986) fue un título mucho más convencional y de menor repercusión, esta vez basado en el cine negro. Al no seguir la línea "incoherente" de los anteriores films de los ZAZ gustó mucho menos, pasando desapercibido y poniendo en entredicho la cualidad artística del trío que si como gagmans son ingeniosos sus realizaciones a veces pecan de superficialidad. Tal vez sus personajes son poco humanos, como lo fueron Charlot o el inspector Clouseau y el resultado resulte un tanto mecánico.
El trío volvió por sus fueros con "Agárralo como puedas" (The Naked Gun, 1988) esta vez dirigido en solitario por David Zucker, creando de nuevo este mundo paranoico a costa de una antigua serie de telefilmes de los sesenta, protagonizada por Leslie Nielsen, quien aparece satirizando su propio personaje, el teniente Frank Deblin.
Tal como hemos apuntado, Leslie Nielsen triunfó en esta película como actor cómico (su papel de "Aterriza como puedas" es secundario), tras una larga carrera de actor "serio", consiguiendo una celebridad que jamás había obtenido a lo largo de su profesión. Los ZAZ ya habían intentado antes una mini serie de televisión "Police Squad", una de las más exitosas en los Estados Unidos, con idéntico planteamiento. "Agárralo como puedas" es uno de sus títulos más populares del terceto donde el absurdo roza los límites de la demencia más absoluta.
Naturalmente el éxito provocó nueva secuela y nuevos desmanes de Leslie Nielsen: "Agárralo como puedas 2 1/2, el aroma del miedo" (The Naked Gun 2 1/2: The Flower of Fear, 1991), también dirigida por David Zucker y "Agárralo como puedas 33 1/3, el insulto final" (The Naked Gun 33 1/3: The Final Insult, 1994), dirigida por Peter Segall, pero con el trío ZAZ en la producción, otro eslabón más en la larga cadena de disparates fílmicos.
Jerry Zucker, en solitario, decidió cambiar de registro y consiguió un gran éxito con "Ghost" (Ghost, 1990), un film romántico que consagró a Demi Moore y Patrick Swayze, obteniendo un Oscar a la mejor actriz secundaria para la genial Whoopi Goldberg. Dicha cinta contenía una célebre escena erótica con Demi Moore y Patrick Swayze ante una rueda de alfarería donde la muchacha amasa una jarra de barro de forma fálica, Jerry Zucker poco podía sospechar que David, su propio hermano, iba a satirizarle en una secuencia similar en "Agárralo como puedas 2 1/2, el aroma del miedo" con Priscilla Presley y Leslie Nielsen convirtiendo la jarra de barro en un auténtico desaguisado.
El guionista de "Ghost", Bruce Joel Rubin, también obtuvo tan codiciado premio que le catapultó más adelante en la dirección de un film similar, producido por Jerry Zucker y con Michael Keaton de protagonista: "Mi vida" (My Life, 1994). De hecho lo mejor de "Ghost" es precisamente la negra Whoopi Goldberg, una estupenda actriz cómica, no suficientemente aprovechada, que corre con un papel muy divertido, una médium que puede hablar con el difunto Swayze y así comunicarse con su esposa, Demi Moore, dando lugar a una serie de jocosas secuencias que son lo más afortunado de todo el metraje.
Si "Ghost" fue todo un éxito, en cambio "El primer caballero" (First Knight, 1995) fue un fiasco. Jerry Zucker adaptó las eternas leyendas artúricas con Sean Connery como rey Arturo, Julia Ormond como reina Ginebra y el chirriante Richard Gere como un imposible Lancelot du Lac.
Por lo que respecta a Jim Abrahams debuta en solitario con "Ensalada de gemelas" (Big Business, 1988), protagonizada por Bette Midler y Lily Tomlin, se trata de una puesta al día de una obra de William Shakespeare, "La comedia de las equivocaciones", centrada en dos pares de gemelas intercambiadas en su cuna al nacer provocando multitud de conflictos en un hotel donde por azar se reunirán las cuatro ya adultas. La trama está bien urdida pese a que ambas actrices son excesivamente desmedidas de interpretación, sin embargo en esta películas de enredos resultan bastante divertidas.
En "Aquí te pillo, aquí te mato" (Welcome Back, Roxy Carmichael, 1990), Abrahams dirige a la inigualable Winona Ryder, y finalmente repite la fórmula que le hizo célebre con "¡Hot Shots!" (Hot Shots!, 1991) con Charlie Sheen, Valerie Gorlino y Lloyd Bridges. Supermán, el cine de ambiente militar y patriotero es esta vez el punto de mira de la parodia. Naturalmente el éxito creó la consabida secuela, "Hot Shots 2" (Hot Shots 2, 1993) con el mismo equipo e idéntico planteamiento.
Este díptico evidencia de un lugar la chispa y el ingenio del trío ZAZ, pero también una cierta frialdad en la realización. A sus personajes les falta vida, como ese general caduco y despistado que interpreta Lloyd Bridges, aunque en contrapartida tenemos a la sabrosa Valerie Gorlino parodiando algunas secuencias de cine erótico como aquella en que se utiliza su ardiente cuerpo para freír huevos con bacón.
Los hermanos Zucker también han decidido convertirse en mecenas de otros realizadores, por ese motivo produjeron "Escápate como puedas" (Brain Donnors, 1992) de Dennis Dugan, con John Turturro, Bob Nelson y Mel Smith formando un trío que recuerda a los hermanos Marx, cuyo humor se deja sentir como una sombra incorpórea, pero que a pesar de los años que han transcurrido desde su desaparición física su estilo aún permanece imbatido.
Otros films producidos por los Zucker son una versión de `El último mohicano" (Last of the Mohicans, 1992) de Michael Mann, con la etérea Madeleine Stowe en camino de convertirse en la musa de los noventa junto a nuestra Aitana Sánchez Gijón, introducida en el mercado norteamericano precisamente por tan peculiares hermanos, productores de "Un paseo por las nubes" (A Walk in the Clouds, 1995), bellísimo film de Alfonso Arau sobre la comunidad hispana en California. La huella de los ZAZ aparece así mismo en títulos de otros autores, "Abajo el periscopio" (Down Periscope, 1995) de David S. Ward, sangrienta chanza sobre las películas de submarinos.

Salvador Sáinz